31 de agosto de 2008

Perfeccionista compulsiva

Al final, he decidido ser imperfecta.
Será la única manera de hacer algo bien
y alcanzar de una vez por todas la perfección.

4 comentarios:

Pedro M. Martínez dijo...

Lo siento, de momento no lo consigues.
O eso me parece.

Reportera de interiores dijo...

Esto es un piropo?, o eso me parece... ;)

Gracias, Pedro. Bienvenido! Muy bonito tu sitio.

Un abrazo,
ana

Pedro M. Martínez dijo...

Ana, pues claro que es un piropo.
Pero te voy a decir una cosa, por mi parte, desde que no me preocupo de la perfección, soy mucho mas feliz.
Imperfectamente feliz.
Un abrazo,

Reportera de interiores dijo...

Pedro, ahora contesto yo tu contestación ;).
Eso creo que la imperfección trae más felicidad. Lo que he escrito es un guiño y al mismo tiempo una declaración de intenciones. El amor, por hablar de lo que más me interesa, es imperfecto, y es que la "pretendida" perfección se deja amar muy mal.
Un abrazo grande,
ana